¿Es normal que se le caigan las hojas al árbol de la abundancia?

Te has dado cuenta de que tu árbol de la abundancia empieza a quedarse pelón y te preguntas si es para preocuparse, ¿verdad? Pues bien, vamos a aclararte esa duda que te ronda la cabeza. La caída de hojas puede ser tan normal como el que se nos caiga el pelo en otoño, pero ojo, que también podría ser señal de que algo no va del todo fino. En algunas circunstancias, perder alguna que otra hoja es parte del ciclo natural de la planta, especialmente si hablamos de cambios estacionales o de una adaptación al nuevo entorno. Pero, si te encuentras con una pérdida excesiva de hojas, ahí sí que debemos poner el foco y entender qué está pasando. No pasa nada, que para eso estamos aquí, para hablar de cuándo es normal y cuándo no, y cómo puedes actuar para asegurarte de que tu planta siga tan próspera y abundante como siempre ha debido ser.

Índice
  1. Recuperando tu árbol de la abundancia
  2. ¿Cómo se riega el árbol de la abundancia?

Recuperando tu árbol de la abundancia

Si notas que a tu árbol de la abundancia se le están cayendo las hojas, no te agobies, es algo que puede pasar y tiene solución. Lo primero es entender las causas. Puede ser por exceso de riego, falta de luz o corrientes de aire frío. Ahora, vamos a devolverle la vida.

Primero, ajusta el riego. Esta planta no necesita mucha agua. Deja que la tierra se seque entre riegos y asegúrate de que el agua drena bien para evitar el encharcamiento. Si el problema era el exceso de agua, con este cambio deberías ver mejoría.

La luz es vital. Asegúrate de que tu planta reciba luz natural pero sin sol directo, que puede quemar sus hojas. Si está muy oscura la zona donde la tienes, busca un sitio más luminoso.

Las corrientes de aire y los cambios bruscos de temperatura no son amigos de tu árbol. Trata de colocarlo en una zona sin corrientes y con una temperatura más o menos estable.

Si el sustrato es el problema, puede que necesites trasplantar tu planta. Usa un sustrato poroso que drene bien y sea rico en materia orgánica. Al cambiarla de maceta, aprovecha para revisar las raíces y cortar las que estén dañadas.

  Moho amarillo en la tierra de las plantas

Recuerda, la paciencia es clave. No esperes resultados de un día para otro. Dale tiempo y cuidados constantes y verás cómo tu árbol de la abundancia vuelve a estar frondoso y sano.

¿Cómo se riega el árbol de la abundancia?

Para regar el árbol de la abundancia, conocido científicamente como Crassula ovata, hay que hacerlo con mimo. Tenemos que entender que esta planta es una crasa, lo que implica que almacena agua en sus hojas y por tanto, no le va bien el exceso de riego. Aquí te cuento cómo hacerlo bien:

  • Primero, comprueba la humedad de la tierra antes de echar agua. Si la tierra está seca al tacto en los primeros centímetros, es el momento de regar.
  • A continuación, riega abundantemente hasta que veas que el agua sale por los agujeros de drenaje de la maceta. Eso sí, en invierno, reduce la frecuencia de riego ya que la planta entra en una fase de descanso y necesita menos agua.
  • Una cosa súper importante: asegúrate de que el plato debajo de la maceta no acumule agua. Si se queda agua estancada, podría pudrir las raíces. Después de regar, vacía el plato.
  • Con la llegada del calor, puede que necesite más riegos, pero ojo, siempre con precaución. No te dejes llevar y riegues más de la cuenta pensando que el solazo lo requiere.

Si tu árbol de la abundancia empieza a perder hojas, no te alarmes enseguida. Puede ser una respuesta natural a un cambio de estación o un ajuste en su crecimiento. Ahora, si ves que la caída de hojas es excesiva, revisa cómo estás regando. Demasiada agua o muy poca puede ser la causa del problema. Y recuerda, la paciencia es la mejor herramienta de un buen jardinero.

Antes de despedirnos, nunca está de más recordar que un buen drenaje es vital. Si tu maceta no drena como debería, es el momento de ponerle solución.

Espero que este paseo por el mundo de tu árbol de la abundancia te haya servido para entender mejor sus caprichos. Si se le caen las hojas, ya sabes, no te agobies, dale amor y los cuidados que hemos comentado. Cualquier duda, aquí estamos para echarte una mano. ¡Un abrazo y suerte con tu planta!

  Cómo poner un tutor a una monstera

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Subir
Esta web utiliza cookies propias y de terceros para su correcto funcionamiento y para fines analíticos. Contiene enlaces a sitios web de terceros con políticas de privacidad ajenas que podrás aceptar o no cuando accedas a ellos. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos. Más información
Privacidad